5 PASOS CRUCIALES PARA GARANTIZAR QUE TU RECLAMACIÓN AL SEGURO DE TU BARCO SEA UN ÉXITO
Estamos en plena temporada y casi seguro que la inmensa mayoría de los que tenéis barco estáis disfrutando a fondo de ello. El hacer un uso extenso del barco también supone que sucedan cosas, y a veces, accidentes. Todo ello nos va a conducir a reclamar a nuestro seguro o al del otro barco. ¿Cómo asegurarnos de que nuestra reclamación va a ser atendida y con éxito? Aquí van unas indicaciones.
1.- PLAZOS
Salvo que tu póliza mencione expresamente otra cosa, a partir de que ha tenido lugar el siniestro tienes una semana de plazo para reclamar. Asegúrate de hacerlo a tiempo o es muy probable que la compañía rechace el siniestro.
2.- COBERTURA
Asegúrate de que lo que estás reclamando está cubierto por tu póliza.
Es muy importante conocer qué cosas cubre nuestra póliza y qué cosas excluye. Eso nos evitará problemas y disgustos al ver que nuestra reclamación es rechazada.
Por ejemplo, hay pólizas que excluyen los daños propios al barco cuando éste está a flote, pero sí que los incluyen cuando el barco está en seco. Por ejemplo, si es tu caso, estás navegando y tienes un incidente en el que una manivela de winche cae y rompe una escotilla, eso no te lo va a cubrir el seguro. Sin embargo, ese mismo escenario, pero ahora con el barco en seco en varadero mientras haces el mantenimiento anual sí que te lo cubrirá.
3.- PRESUPUESTO
Si los dos puntos anteriores son afirmativos, una sugerencia es ir adelantando camino y solicitar un presupuesto para la reparación de los daños a un industrial de nuestra confianza. Cuando el perito de la compañía vaya a inspeccionar los daños es muy probable que sea una de las cosas que te pida. Así ya tendremos trabajo adelantado y el trámite irá más rápido.
4.- ¿REPARAR O MINIMIZAR DAÑOS?
Aquí puede surgir un dilema. Si el daño que ha sufrido el barco puede esperar a ser reparado sin generar más perjuicios o daños añadidos al barco, la sugerencia es dejar el daño tal cual está hasta que el perito de la compañía aseguradora lo haya visto y haya dado el OK a su reparación y cobertura por la póliza. De lo contrario podría poner pegas o incluso no aceptar el siniestro o el importe de la reparación.
Si por el contrario, si no se repara urgentemente o se toman ciertas medidas con los daños sufridos y el barco podría dañarse o deteriorarse más de lo actual, es nuestra obligación tomar las medidas adecuadas para que ello no ocurra. Dicho esto, es muy importante ir documentando todo el proceso lo más detalladamente posible. Tomar cuantiosas fotos y videos del siniestro, los daños, las medidas que se han tomado y por qué se han tomado, lo que se va haciendo, etc. Así como, a cada paso que se da, ir notificando al seguro. También es muy necesario documentar con facturas todos los gastos que hayan surgido consecuencia directa del siniestro y como medida necesaria para minimizar los daños al barco.
5.- SI EL SINIESTRO ES RECHAZADO
Si hemos cumplido con todos los puntos anteriores (reclamado en plazo, con los daños claramente incluidos dentro de la cobertura y hemos hecho todo lo posible para minimizar daños y documentar todo el proceso) y el siniestro es rechazado, no va a quedar más remedio que reclamar por la vía judicial. Si bien este escenario no suele ser habitual con compañías aseguradoras “serias”, sí que hay algunas pocas compañías que pueden hacer lo posible para no pagar o hacerlo cuanto más tarde mejor. Si es tu caso, te sugiero en primer lugar que cambies de compañía. Ahora empiezas a ver por qué era tan barata tu póliza, ¿verdad?
Para la reclamación vas a necesitar un buen abogado de confianza y conocedor del sector, así como un perito de parte que inspeccione los daños y redacte un informe con sus conclusiones como soporte para tu abogado. No escatimes con esto pues es la “herramienta” con la que cuentas para convencer al juez y que la compañía asuma sus obligaciones. En caso de ganar el litigio, tu abogado reclamará las costas y te podrán ser reembolsados los importes.
CONCLUSIÓN
Llegados a este punto mi deseo es que no tengas que hacer uso de estas sugerencias nunca y que tengas una navegación segura y placentera. Y en el caso de que tengas que reclamar al seguro, recuerda: Presta atención a los plazos, asegúrate de que la póliza cubre tu caso, pide un presupuesto, documenta todo lo mejor posible e informa a la compañía de cada paso que vayas dando.
¡Feliz travesía!
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